Homenaje a Les Carboneres

Arte y cultura

Monumento y Homenaje a Les Carboneres

Güeria Carrocera, San Martínez del Rey Aurelio

En el lugar que ocupaba el lavadero de Minas de La Encarnada, en La Güeria de Carrocera, se levanta este conjunto escultórico erigido en 2004 como reconocimiento y homenaje a las mujeres carboneras, conocidas como Les Carboneres. Las mujeres, pilar fundamental de la minería por configurar el sostén de la estructura familiar sobre la que se asentó un trabajo fuertemente masculinizado, tuvieron en las empresas hulleras un papel limitado a trabajos auxiliares y de exterior.

Si bien el término ha acabado por definir a todas las mujeres dedicadas a trabajar en el entorno del carbón, suelen distinguirse entre Carboneras propiamente dichas y Rebuscadoras. Las primeras eran las trabajadoras encuadradas dentro de una empresa y que solían desarrollar su labor en los cargaderos de mineral o en las cintas de escogido a cambio de un jornal, habitualmente más bajo que sus compañeros varones. Las Rebuscadoras, por su parte, trabajaban por libre, en ocasiones como actividad principal, como complemento en otras, escudriñando las escombreras en busca del carbón que los pocos eficaces lavaderos desechaban como estériles. Las Rebuscadoras vendían luego a carbonerías- comerciantes al por menor de la hulla- o a particulares, el mineral recogido, o bien lo utilizaban para consumo propio pudiendo enajenar el vale, el derecho histórico a una cantidad de carbón mensual que tenían todos los mineros en activo, jubilados o viudas.

El conjunto escultórico de La Güeria, obra de Oscar Luis Laviana, es el primer y único recuerdo levantado en Asturias a las Carboneras, a su trabajo y a su papel en la industria y cultura mineras. Erigido gracias a la suscripción popular y al apoyo de la Asociación Cultural Amigos del Valle de La Hueria, ante él se realiza desde 2004 un sencillo homenaje a estas mujeres, consistente en una pequeña intervención que glosa diferentes aspectos y visiones de su trabajo, entorno y época, así como una entrega floral. En el primero de estos actos estuvieron presentes once Carboneras de las que hoy solo una, Pila, queda como testimonio de una época de trabajo, sudor, y carbón. Mucho carbón.

Natalia Tielve García

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