Arte y cultura
Varios actos de homenaje precedieron a la iniciativa de erigir un monumento en memoria del empresario Mariano Suárez Pola. En 1911 se colocó una placa en su casa natal y, tres años después, son trasladados sus restos desde el cementerio de Ceares, Gijón.
Mariano Suárez Pola (Luanco, 1800-Madrid, 1884) emigrado a Cuba, como muchos de sus compatriotas, regresó a Asturias en 1840. A partir de ese momento promovió con éxito varios establecimientos industriales en Gijón, como la fábrica de vidrios “La Industria” y de loza “La Asturiana”.
También como muchos de los indianos regresados de América, contribuyó al progreso de su localidad natal, entre otras iniciativas, con la puesta en marcha del Instituto Santísimo Cristo del Socorro cuya financiación permitió impartir materias como náutica, contabilidad o dibujo.
En 1908 el Ateneo Obrero de la localidad designa una junta gestora y se promueve una suscripción popular con el objetivo de reunir los fondos necesarios para el pago del monumento con el que el pueblo de Luanco habría de agradecer a su benefactor. Contribuyeron, además de todas las familias de Luanco, el ayuntamiento, autoridades locales y la colonia de emigrantes gozoniegos en Cuba.
El diseño del monumento se encargó al escultor Julio González Pola (Oviedo, 1865- Madrid, 1929). Formado en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid, González Pola destacó por sus monumentos erigidos a héroes militares.
El lugar elegido para la colocación del monumento fue el Campo de la Iglesia, en cuyo interior habían sido inhumados los restos de Suárez Pola. La estatua, fundida en bronce en Barcelona, representaba al homenajeado sentado sobre unas rocas de piedra sin pulir que, a su vez, se apoyaba sobre un pedestal con delicados elementos decorativos. La inauguración tuvo lugar el 8 de agosto de 1915.
En 1967, coincidiendo con la inauguración de la nueva casa consistorial, el monumento se traslada a su localización actual en la Plaza de la Villa, en las inmediaciones del centro de enseñanza que él mismo había promovido.
Rubén Domínguez
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