El grupo Urbiés llegará a contar con diez pisos de explotación; uno de ellos, El Mosquil, se localizaba en La Molinera donde se construyeron varios edificios destinados a casa de aseos, oficinas, cuadras y talleres. Para el traslado de la producción de este grupo, en 1943 entró en funcionamiento una prolongación de 5 km del ferrocarril que enlazaba los grupos de montaña de la empresa. La Molinera y Fortuna eran los puntos en los que se concentraba la producción que desde ahí continuaba hasta los lavaderos de La Cuadriella.
La actividad del grupo Urbiés finaliza en el año 1973. Algunos restos, como la bocamina, recuerdan la historia de esta explotación.
Mónica García Cuetos
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