Taller de Ajuste de SMDF

Finalizado en 1896, el Taller de Ajuste consta de tres naves que, ocupando una superficie de 1.250 metros cuadrados, incorporan cubierta en dientes de sierra. Con cerramiento de ladrillo visto, en consonancia con la línea estética predominante en los edificios de la Duro, en el interior se disponen columnas de fundición que soportan cerchas metálicas.

Las naves estaban destinadas a acoger la maquinaria necesaria para acometer los trabajos de reparación que la factoría requería: cuatro tornos para cilindros laminadores y veinte máquinas-herramientas, impulsadas por un motor de 50 caballos de potencia, de expansión automática. Cada nave contaba con una grúa corredera de hierro que facilitaba las maniobras y seis pescantes con aparatos elevadores.

Pese a las sucesivas intervenciones que ha experimentado, el inmueble no ha visto modificada su apariencia de forma drástica. Se han preservado las columnas de fundición y las cerchas metálicas en el interior, así como el cerramiento de ladrillo visto y la cubierta tipo shed en buena parte de la estructura; solamente uno de los tramos incorpora cubierta a doble vertiente.

No obstante, como consecuencia de la adhesión de nuevos módulos, ha adquirido mayor complejidad en su configuración volumétrica. Así, encontramos diferentes tramos de fachada y desigual distribución en altura. En los dos flancos laterales prevalecen las líneas horizontales, mientras que el central gana en elevación y movimiento de planos. Los vanos, de configuración variada, se disponen entre pilares rematados en forma de almenas, unificando visualmente el edificio en altura. Conserva en el interior algunas piezas de maquinaria de gran interés.

Natalia Tielve García