Acería Martin Siemens

La estructura metálica del inmueble es la primera de su clase en la factoría de la Empresa Nacional Siderúrgica, S.A (ENSIDESA), y precedente inmediato de las tres acerías LD de la misma planta. La cimentación de los más de cien mil metros cuadrados que ocupa fue más compleja que en el resto de edificios y en ella se emplearon ciento dos campanas y más de tres mil pilotes.

La función principal de este espacio, dentro del proceso siderúrgico, consistía en aplicar las tecnologías pertinentes para la obtención de unas 800.000 toneladas anuales de acero, utilizando como materias primas el arrabio producido en los Hornos Altos, chatarra, caliza, cal y, como combustibles, gas y alquitrán derivados de la producción de cok. Este método de fabricación de acero creado por Carl Wilhelm Siemens y por Pierre-Émile Martin perdió progresivamente su peso industrial con el desarrollo del método de Linz-Donawitz (LD).

La planta está compuesta por tres naves, con luces comprendidas entre los veinte y los casi veintiséis metros, de diferentes alturas para facilitar la ventilación y la entrada de luz natural. La primera albergaba los hornos basculantes y el mezclador, y contaba con dos puentes-grúa. La segunda, destinada a la realización de las coladas, contaba con cuatro puentes-grúa de ciento cuarenta toneladas cada uno que manejaban las cucharas de cien toneladas de capacidad y, a su vez, disponían su contenido sobre trenes-lingoteras dirigidos a Hornos de Fosa. La última nave cumplía una función de almacenamiento de los materiales necesarios para la producción.

La Acería Martin-Siemens se adscribe a los parámetros del Movimiento Moderno, con interiores diáfanos y versátiles, de líneas rectas y volúmenes claros. Tras el cese productivo fue reconvertida en taller de calderería para la elaboración de fustes para torres eólicas, manteniendo las seis chimeneas de ladrillo originales en una rehabilitación escrupulosamente respetuosa con los valores originales del edificio.

Rubén Domínguez Rodríguez