Círculo de Obreros

El Círculo de Obreros de Trubia, primera denominación que tuvo el que hoy conocemos como Casino Obrero, es uno de los emblemas del barrio de Junigro. Fue construido a instancias de Luis Hernando Espinosa, director de la Fábrica de Armas, quien firma el plano del edificio el tres de abril de 1918; el día quince de ese mismo mes el Ayuntamiento de Oviedo incoa el expediente de obra. La primera parte que se inauguró fue el salón de lectura y la sala de recreo, lugar de charla y descanso para el personal de la fábrica de armas que contaba con bar y mesas de juego; con el tiempo se irían añadiendo la biblioteca, con cerca de 10.000 volúmenes o el salón de billar.

Uno de los espacios fundamentales de este edificio es el teatro, inaugurado como tal en octubre de 1918 mediante una representación teatral de la compañía Hermanos Enguídanos, grupo itinerante de gran renombre. Muestra de su modernidad y de la influencia que ejercía la fábrica de armas es el hecho de que en los primeros años de la década de 1920 se instalaría una cámara de cine. Desde ese momento, el teatro ha visto pasar por su escenario multitud de representaciones teatrales, películas, conferencias o asambleas.

Las décadas de 1940 y 1950 fueron las de mayor esplendor de este espacio, con más de un millar socios, estrenos cinematográficos y teatrales o grandes bailes. Fue el centro social y cultural de Trubia que empezó su declive en la década de los 70, época en la que pasa a denominarse Centro Cultural de la Fábrica Nacional de Trubia. Tras su cierre, en 1996 fue adquirido por el Ayuntamiento de Oviedo, convirtiéndolo en Centro Social. Una nueva reforma en 2008 le dio su fisonomía actual, respetando la estructura longitudinal, sus tres cuerpos separados por dos torres y recuperando el balcón del proyecto original.

Manuel Antonio Huerta Nuño