Edificio de REPALSA

La producción de la refinería ha de vincularse inicialmente al desarrollo de las actividades sideroquímicas que, de manera paralela a las propiamente siderúrgicas, promueve la factoría de Ensidesa, con el establecimiento de una planta de alquitrán de la que se nutre Repalsa,. Avanzados los años sesenta, la producción de la firma se diversifica, orientándose hacia la transformación de los aceites residuales derivados del alquitrán, dando lugar a productos semielaborados. Partiendo de los aceites del alquitrán y del carbón, se crea una planta de caustificación de lejía en el año 1967.

Con todo, el complejo experimenta un progresivo crecimiento en la década de 1960 y en el arranque de la siguiente, fechas en las que son erigidos los edificios destinados a talleres, almacenes, oficinas y laboratorios. Entre estos inmuebles podemos subrayar el interés del Edificio de Oficinas que, atribuido al arquitecto Ignacio Álvarez Castelao, se construye en el año 1972.

Se trata de un edificio modular, organizado en dos cuerpos: uno cilíndrico, anclado en el suelo y un segundo cuerpo rectangular elevado sobre pilotis de acero. Funcionalmente, el volumen cilíndrico estaba destinado a acoger los accesos y servicios, mientras que el cuerpo rectangular, en altura, alojaría las oficinas. Es destacable la resolución de la fachada, el sentido plástico que introducen los elementos prefabricados de hormigón, siguiendo patrones geométricos y acentuando los juegos claroscuristas; tratamiento que cabe relacionar con otras obras del arquitecto, como la Facultad de Geológicas o el Edificio de Oficinas para sede social deHunosa, ambos en Oviedo.

REPALSA cesa su actividad en 1993. Cinco años más tarde, sus instalaciones fueron adquiridas por Química Alba, S.A., firma dedicada al tratamiento de residuos industriales. Hoy en día el estado de abandono en el que el complejo se encuentra es sangrante.

Natalia Tielve García