Transportes
345094326
Conjunto Industrial ENSIDESA
345095144
UNINSA
344666116
Puerto de El Musel
379335658
Ferrocarril de El Valle
La implantación de ENSIDESA y su red ferroviaria no se circunscribieron al entorno inmediato de la planta de Avilés, sino que tuvieron unas consecuencias más amplias. La necesidad de asegurar el suministro de materias primas llevó a buscar un enlace con el puerto de El Musel.
Para ello se aprovechó un ferrocarril tendido desde Trasona a la cantera de Tamón, que fue ampliado hasta Aboño con el fin de conectar con las vías de la Junta de Obras del Puerto. El trazado, de 14 kilómetros de longitud, era de ancho ibérico y vía única y fue puesto en servicio en 1969. La línea incluía fuertes pendientes y un túnel de unos dos kilómetros en Tabaza que desembocaba cerca de la estación intermedia de El Valle.
A su vez, la construcción de la planta de UNINSA ofreció al ferrocarril la ocasión de convertirse en el enlace entre las dos grandes siderurgias asturianas. Para facilitarlo, en 1972 se construyó una vía de triángulo en Aboño que permitía el acceso directo de trenes procedentes de Veriña a través de las vías de RENFE. Por ella comenzó el tráfico de arrabio procedente de los altos hornos gijoneses con destino a la acería de ENSIDESA.
Ese enlace constituía un engorro por el cruce a nivel con la línea general León-Gijón, que soporta un intenso tráfico ferroviario. Por ello, se decidió la construcción de un nuevo túnel bajo el monte Areo para enlazar directamente la factoría de Veriña con El Valle. Entró en servicio en 1997 e incluía un gran viaducto de hormigón en Pervera. Finalmente, en 2010 se duplicó el túnel de Tabaza, con lo que todo el ferrocarril cuenta con vía doble.
A lo largo de su historia, la línea ha ido cambiando de propiedad conforme lo hacían las grandes plantas siderúrgicas: de ENSIDESA pasó a CSI (1994), a Aceralia tres años más tarde, para convertirse en Arcelor en 2002 y, desde 2006, Arcelor-Mittal.
Con el cierre de las baterías de cok de Avilés (2019), la línea perdió uno de sus tráficos fundamentales, el de carbón en bruto desde Aboño y el de cok de vuelta a Veriña. A pesar de ello, en el momento actual mantiene un importante tráfico de torpedos de arrabio y laminados, además de servir como enlace entre las redes ferroviarias de ambas factorías.
A pesar de su modernidad, esta línea ofrece un enorme interés patrimonial como uno de los últimos testimonios en España de las grandes redes ferroviarias típicas de la Revolución industrial.
GALERÍA DE IMÁGENES
Comentarios recientes